Aunque no me gusta mucho hacer este tipo butacas, esta vez acepté por que se trataba de una pieza con mucho valor sentimental para su dueña. Era la butaca de su madre que falleció hace poco y aunque era una pieza muy corriente y desde el punto de vista económico no merecía la pena, ella quería conservarla e incorporarla a la decoración de su dormitorio.
Elegimos una tela clásica muy neutra que combinaba bien con las flores de la colcha (no confundáis, nada que ver el viejo chinz que traía la butaca).
Si os fijáis es una pieza con unas proporciones muy "escasas", tiene las orejas pequeñas y muy cerradas. Por otro lado esta hecha como de fundas que se fueron montando en una cadena y después clavando y atornillando.
No se si me explico bien, pero el caso es que tuve que desmontar la estructura y aproveche para abrir un poco esas orejas y darles más forma, también añadí unas piezas de madera en los brazos para poder tapizarlos sin enfundar y darle otro estilo.
Arreglé el fondo del asiento y le puse más altura para seguir proporcionando la pieza que era un poco "rara", ahora pide a gritos un cojín para los riñones, quizás algo así.
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| vía Zara Home |
o así
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| vía zara Home |
Creo que unos pocos cambios, pero sobre todo el de alterar ligeramente las proporciones le ha dado puntos.
Me hubiera gustado dejar las patas a la vista pero es que hasta no ocupaban una posición muy armoniosa, salían de la estructura por la parte interior y se veían como metidas, así que finalmente las tapé y se acabó el problema.
Pronto os enseñaré un cabecero chulísimo que estamos haciendo en los cursos, estoy deseando verlo terminado.
Muy buen trabajo. Ha merecido la pena cambiarle las proporciones. A mí me gusta el cojin de los elefantes.
ResponderEliminarUn saludo
Este es uno de esos trabajos que me han dejado lela, totalmente: el paso de una butaca, con permiso de su dueña, vulgar y corriente a una pieza con clase, estilo, en fin...me ha gustado mucho tanto la elección del textil como esos preciosos clavos o chinchetones, que lucen un montón. A mi personalmente me encanta aunque no se vean las patas, ese faldoncillo bajo le queda de cine
ResponderEliminarBss
Jope menudo cambio le has dado al sillón, casi lo has resucitado de una vida muy sencilla y le has dado un aspecto mucho más vistoso estéticamente. La tela preciosa junto con las maxi tachuelas y también me gusta el faldón que tapa las patas.
ResponderEliminarDefinitivamente todo lo que pasa por tus manos da un cambio espectacular y seguro que la dueña estará encantada con tu trabajo. Le debe quedar de maravilla en su dormitorio y desde luego que estrena sillón para unos cuantos años mucho más actual y cómodo.
Me quedo a la espera de ver ese cabecero.
Besitos Mamen
Me encanta el cambio!! Te ha quedado muy elegante!
ResponderEliminarEnhorabuena por tu trabajo!, seguro que le has dedicado mucho tiempo, pero después siempre merece la pena.
Espero ver el cabecero.
Besos
Paqui
¡Ha quedado precioso! ¡Menudo cambio! Debe ser muy complicado tapizar un orejero... Bss y feliz finde.
ResponderEliminarEres la caña, te atreves con todo. Una idea estupenda lo de sacarle las orejas, ha quedado estupendo y mucho mejor que el original. Un beso grande
ResponderEliminarBego (del baul artesano)
HOla Bego, escribeme en privado y cuentame que esde tuvida. besos.
ResponderEliminarTe ha quedado preciosa....le has dado vida para un monton de años más y lo más importante, has hecho feliz a tu clienta
ResponderEliminarUn beso
Te quedó divina, me encanta.
ResponderEliminarBesitos guapa
Como siempre me encanta ver tus trabajos, por que siempre tienen un toque que les da estilazo, es este caso la enormes tachuelas que rompen con lo común del diseño de la butaca; la tela muy elegante a mi juicio pide a gritos el cojín de los elefantes.
ResponderEliminarMe ha parecido una coincidencia tremenda que yo estoy ahora con un orejero, es la primera vez que me atrevo y lo he hecho 1º porque es una donación, 2º porque la pieza no merece la pena y me permite arriesgarme, el caso es que estoy a medias y pensando en desistir me está resultando super-complicado pero el ver tu trabajo me ha animado a continuar como un reto.
Gracias por inspirar.
Gracias Fran, me alegro si te he animado a seguir y aprovecho para recomendarte un blog donde puedes encontrar muchísima información sobre el mundo de la tapiceria: Sinapsis de un tapicero, también me gustan Tapizame y Esquelataje y tapiceria, seguraoque te serviran de ayuda. Un abrazo.
EliminarMuchas gracias por la recomendaciones, echaré un vistazo.Un abrazo.
EliminarHola Mamen.
ResponderEliminarTodo un acierto abrir las orejas, es un cambio sustancial para la vista y armonía de la pieza, aunque (si me lo permites), yo no habría tumbado la tela en los brazos, con la raya en vertical también habrías conseguido un efecto visual que "abriría" los brazos, eso sí, las rayas cantarían cosa mala en el frente a nada que las torciera una grapa...
Respecto al cojín, yo le metería un liso para romper con tanta raya y, tal vez, cuadrante, para que rellenara espacio... y ya vale, que me lío a discurrir y te cambio el modelo...
Bueno Mamen, como siempre, un trabajo estupendo por mucho que no te gusten estas butacas. Eres el claro y vivo ejemplo del que la sigue, la consigue.
También se me pasa por la cabeza que estarás haciendo enemigos entre los tapiceros de la localidad, así que ándate con ojo por la esquinas, jeje...
Un abrazo, Tapestry.
Llevas toda la razón, la verdad que las he tumbado por que en el otro sentido no me llegaba la tela, pero si que tiene que hacer el efecto de "abrir" al fugar las lineas por sitios diferentes. También hay una tachuela que se me ha desviado unos milímetros (seguro que ya la has visto) pero al corregir se rompe la soldadura y no me queda ninguna más, a ver si esta semana ´las vuelvo a conseguir sino tendrá que quedar a si a mi pesar.
ResponderEliminarMe encantan tus aportaciones, ves más allá y están llenas de fundamento.
Un abrazo.
Fue lo primero que se me pasó por la cabeza, a veces el metraje nos juega estas malas pasadas ;)
EliminarY en cuanto a la tachuela podrías pegarla si se te rompe o soldarla tú misma, seguro que echas cordones de soldadura como si lo hicieras a diario, jeje...
Aunque se te vayan los ojos a la tachuela, tiene pase, que te pides el todo (como debe ser ;)
Un abrazo Mamen.
Mucho mejor tras el cambio..¿donde va a parar?¡¡¡
ResponderEliminarSaludos
Me gusta el tono pastel que has elegido para la tela del sillón orejero ,una gran eleccion
ResponderEliminarPreciosa reconstrucción de este sillóne de diseño. A veces el valor sentimental puede con el material. La dueña estará encantada de poder tener el sillón de su madre en su casa sin que desentone con el resto de su decoración.
ResponderEliminarTe ha quedado preciosa! Me encantan los muebles con historia.
ResponderEliminarHola Mamen , cuanto tiempo !!!! No se como se me ha pasado el tiempo , epro llevo casi 3 mese sin publicar, esta vida que nos complica..... Voy a retomar mi blog en breve, pero que sepas que os echo de menso y que me paso por aqui , para ver que haces , aunque no tenga tiempo para escribirte.Precioso trabajo , como todos los tuyos.Un beso enorme.ANA
ResponderEliminarTe metes en trabajos pequeños, eh!?? Te ha quedado de lujo!!
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