UN AGUAMANIL PARA UNA REHABILITACiÓN

Hoy os traigo un aguamanil, que ya hace semanas  tenía listo, pero aún no lo había montado por que tenía la piedra a reparar (estaba partida en dos), y en la marmolería han hecho un excelente trabajo, lo han unido con unas varillas y la verdad no se nota nada.

 La pila de la foto es la original, esta rota y no sirve más que como contenedor de algo bonito, pero como se va usar como lavabo en una rehabilitación, le vamos a poner una pila de sobreponer moderna, de las que ya traen el agujero para el grifo, de esta forma también ganaremos unos centímetros por que estos muebles eran más bien bajos.

 La barra de cristal de la toalla , aún no la he colocado por que todavía tiene que ir a su nueva casa y me pareció una temeridad al tratarse de una barrra de cristal, era la que se le puso en los años 50. Cuando lo coloquemos definitivamente, irá en el lateral derecho.
 

Si observáis el mueble con detenimiento notaréis unas extrañas proporciones. Esto se debe a que probablemente en origen llevaba la encimera de madera y no tenia el repecho de mármol vertical, el espejo bajaba unos 25cm.  y se alzaría unos cinco sobre la estructura.Con el tiempo la madera se pudrió y la sustituyeron por la piedra, añadieron el repecho vertical y subieron sobre este la estructura del espejo, quedando más a la altura de una persona de hoy en día.

La idea es poner una pila rectangular un poco alzada que compense esa desproporción entre el espejo y la encimera, algo como la de la imagen. Además mezclar algún elemento moderno con una pieza antigua hace un bonito contraste.Algo de este tipo y que aún no tenemos por que hay que tener en cuenta la ficha técnica para que todas las medidas coincidan bien, los latiguillos y válvulas no vayan muy forzados, ...

No guardo fotos del antes, tan sólo esta del durante cuando me dedicaba a retirar con decapante una gruesa mano barniz universal que le cayó allá cunado le subieron el espejo,...aquí observe en las marcas de los listones traseros que no me equivocaba ni un pelo.

Entre manos unas mesillas preciosas, una butaca, una supermesa de impresión, una antiquísima vitrina y un montón de pequeñas piezas, no me olvido de nadie, os doy las gracias por vuestra paciencia.